jueves, 6 de noviembre de 2014

POR EL SUEÑO AFUERA_ ADRIAN GONZALEZ DA COSTA



ADRIAN GONZALEZ DA COSTA -    POR EL SUEÑO AFUERA
CICUS , UNIV. DE SEVILLA, 2014









Adrián Gonzalez da Costa, (Lepe,1979). Licenciado en filología hispánica por la Universidad de Sevilla . Tiene  el premio Adonáis (2002) y el Opera prima (2004) de la Asociación de críticos de Andalucía por "Rua dos douradores", un libro primerizo donde Kavafis, Vallejo, Blas de Otero y Fernando Pessoa forman el espejo donde busca su propio rostro. Alterna creación y recreación, así ha volcado al español una antología de poetas portugueses para el ayuntamiento de Ayamonte durante el 2003, dentro del III Festival de Música Internacional de esa ciudad.   


A decir del jurado X Premio Andaluz de la Crítica su obra poética se inscribe en la tradición de Pessoa, “una poesía de la experiencia que no renuncia a elementos surrealistas y en la que destacan la ironía, la madurez y los versos bien medidos que dan lógica al sinvivir".


En Papel–Literario dice José García Pérez: “La poesía de González da Costa es tan inquietantemente estremecedora que su discurso dispara la nostalgia del encuentro con uno mismo”.


Ahora nos presenta “Por el sueño afuera”, Premio de Poesía de la Universidad de Sevilla,  un bello poemario que consolida la pujante trayectoria de este joven poeta.  De hermosa factura y pulcra escritura, en la que las imágenes vuelan en metáforas extraordinarias: “De su letra sin fondo, rozándome la cara/  se eleva un  vuelo de aves fugaces como un sueño,/ suaves como el humo sumiéndose en la noche/7 y oscuras como pétalos en un cuenco de vino.” Vuelo en el que está presente la admiración hacia: “Ella domina el vuelo nocturno de las aves./ La siguen los planetas como perros en celo./ Desde lo más profundo, las distancias le cantan/…”Y  el recuerdo emocionado hacia la madre : “Esa mujer que hoy por vez primera / cumple cincuenta y tantos años, tuvo veinte en la boca./…” Y desde el recuerdo a la decepción, en un lenguaje hondo y metafísico, que , efectivamente, trae visos de Pessoa: “La manzana que muerdes guarda al fondo un gusano. /El jardín que te gusta tiene un ábol prohibido/…”.


Con una métrica adecuada al contenido, en la que predominan los endecasílabos, incrementa en este bello poemario su anunciada madurez, pudiendo entrar con esta obra en la nómina de los excelentes poetas jóvenes que son capaces de hacernos volar en busca de esos sueños.

F.Basallote